No todas las bacterias son perjudiciales para el organismo. Los lactobacilos pertenecen a la categoría de bacterias no patógenas. Esto significa que no atacan al organismo. Algunas de ellas son realmente fundamentales para el buen funcionamiento del cuerpo humano.
Existen bacterias lactobacilos que provienen directamente de los alimentos. Estas bacterias buenas desempeñan un papel importante en el mantenimiento y el equilibrio de la flora microbiana de la mucosa digestiva y vaginal. Oxylabhealthcare te explica todo lo que necesitas saber sobre los lactobacilos.
Los lactobacilos o lactobacillus son bacterias en forma de bastón con capacidad de fermentación, presentes en grandes cantidades en el organismo. Los diferentes lactobacilos se encuentran en diferentes ambientes. Desempeñan diferentes funciones en el organismo. Los lactobacilos se encuentran en la mucosa vaginal, oral e intestinal y en algunos alimentos vegetales.
Los lactobacilos se encuentran especialmente en las aguas residuales y en los productos fermentados. En las personas inmunocompetentes, estas bacterias nunca causan enfermedades. Los lactobacilos son importantes para la digestión y las defensas naturales del organismo. En casos de fatiga general, estrés o mala alimentación, el número de lactobacilos en el organismo puede disminuir. Esto puede provocar trastornos vaginales o digestivos.
Se han identificado unas 192 especies de lactobacilos. La mayoría de estas especies se encuentran en alimentos de origen animal o vegetal. Algunos se utilizan en la producción de alimentos fermentados como el pan, la cerveza, el vino, el queso y el yogur. Una veintena de lactobacilos asociados a microorganismos están presentes de forma natural en el organismo.
Los lactobacilos se encuentran principalmente en el tracto digestivo. Su desarrollo en este órgano se debe al consumo de ciertos productos específicos. Será necesario diversificar la dieta para restaurar gradualmente una microbiota adaptada con el tiempo. Algunos medicamentos y complementos alimenticios pueden utilizarse cuando la alimentación por sí sola ya no es suficiente.
Los lactobacilos son bacterias no patógenas presentes en el organismo.
Tienen muchas virtudes y permiten, entre otras cosas :
Los lactobacilos promueven la formación de una biopelícula protectora contra las bacterias patógenas en la membrana mucosa. También ayudan a prevenir y aliviar la inflamación del sistema digestivo y la diarrea. Los lactobacilos mejoran la consistencia y la frecuencia de las deposiciones en los adultos que sufren de estreñimiento. Estas bacterias también reducen el tiempo de tránsito intestinal.
Una ingesta constante de lactobacilos ayuda a reducir la grasa y a prevenir ciertas alergias, como la dermatitis atópica. Estas bacterias no patógenas estimulan el sistema inmunitario proporcionando una mayor resistencia a las infecciones. Ofrecen una excelente protección contra los hongos y otras infecciones microbianas. Los lactobacilos también mejoran la salud mental y moderan la aparición de ataques de migraña.
Algunos complementos alimenticios y medicamentos pueden aportar los lactobacilos necesarios para la salud cuando la alimentación por sí sola ya no es suficiente. Algunos medicamentos con lactobacilos se venden para uso oral. Pueden utilizarse durante unos días después de tomar un antibiótico, especialmente para la prevención o el tratamiento sintomático de la diarrea. Es importante respetar la dosis y la duración del tratamiento para garantizar la eficacia del producto.
Los lactobacilos utilizados durante mucho tiempo o en cantidades excesivas pueden tener efectos perjudiciales para la salud. Para mantener la flora, se recomienda un ciclo de 10 días al mes. No se recomienda el uso de productos que contengan bacterias vivas, sin consejo médico, en personas inmunodeprimidas (tratamiento prolongado con corticoides, SIDA, linfoma, tratamiento del cáncer, trasplantes, etc.).
Estos productos también están contraindicados en casos de cáncer del aparato digestivo o de pancreatitis aguda. En algunas personas, la toma de probióticos que contienen lactobacilos puede provocar reacciones de hipersensibilidad (alergia, urticaria) o intolerancia que requieran la interrupción del tratamiento.
El Lactobacillus también puede causar irritación del intestino al inicio del tratamiento o un aumento temporal de los gases intestinales. Para un tratamiento curativo, se recomienda empezar con pequeñas dosis que se irán aumentando gradualmente. De este modo, se evitan la mayoría de los efectos secundarios.
No dudes en pedir consejo a tu médico o farmacéutico. El servicio al cliente de Oxylabhealthcare está a tu disposición para informarte sobre nuestros complementos alimenticios.
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